El Partido Popular Europeo (PPE) quiere sacar adelante como sea su demanda de que la UE reconozca a Edmundo González como el presidente electo “legítimo” de Venezuela, como reclaman también los populares españoles. Su reconocimiento es una exigencia que esta formación política está dispuesta a mantener incluso si supone cruzar una línea roja de gran calado político: romper el cordón sanitario a la extrema derecha en la Eurocámara, reforzada desde las elecciones europeas de junio. Los populares se disponen a pactar esa resolución con otras formaciones más a la derecha y a apartarse de la postura que defienden socialdemócratas, liberales, verdes e izquierda minoritaria.