El ministro de Exteriores libanés, Abdalá Bu Habib, ha puesto este miércoles número a las personas que escapan aceleradamente (en coches, motos, andando…) de los bombardeos masivos que Israel inició el lunes en el país y que han matado a cerca de 600 personas y herido a más de 1.800. Estas son cifras inéditas en el país en tan poco tiempo desde el final de la guerra civil, en 1990. “Teníamos 110.000 desplazados y ahora esta cifra se está acercando al medio millón”, ha dicho el ministro en un acto organizado por el think-tank Carnegie Endowment for International Peace. Un éxodo masivo que se dirige hacia casas de familiares (o, directamente, de desconocidos), colegios habilitados como refugios u hoteles. Cientos de refugiados sirios, además, están regresando a su país.