A lo largo de la historia, la humanidad ha experimentado eventos con consecuencias devastadoras a nivel global. A este tipo de eventos con el potencial de infligir un daño grave al bienestar humano se les llama riesgos catastróficos globales. El ejemplo más reciente es la pandemia de covid-19, que se estima ocasionó la muerte de unos 27 millones de personas y afectó severamente a la economía mundial. Otro ejemplo del pasado es el “año sin verano” de 1816, en el que una erupción volcánica en Indonesia provocó fallos de cultivos y hambrunas en todo el planeta.